La caída (en picada) de la popularidad de Enrique Peña Nieto es abrumadora, a tal grado que de ser considerado el salvador de México, hoy en día es el hazmerreír no solo del país sino de gran parte del mundo y esto es debido a varios factores:
- La poca preparación del ciudadano presidente
- La crisis por corrupción
- La crisis por plagio de tesis
- La mala elección de su gabinete
Pero existe un detonante más grande (mi punto de vista) que los antes mencionados, y es el hecho de que tiene asesores desconocidos, nulos de carácter y sobre todo faltos de experiencia. El sr. Carlos Pérez Verdía es el coordinador de asesores de Peña Nieto y según el portal de presidencia cuenta con credenciales en temas económicos y de asuntos internacionales.
Aquí es donde uno se cuestiona, ¿sí Peréz Verdía es especialista en estos asuntos, cómo permitió el error garrafal de invitar a Donald Trump?
Este hecho se lo atribuyen a Videgaray Caso (por su nula experiencia es creíble), sin embargo, él no es el asesor, Carlos Pérez es quién guía la imagen del presidente, no su secretario de hacienda (no es defender al ex secretario) y quien debe dar explicación de estos errores es precisamente el asesor.
Veamos algunos los errores y consecuencias del coordinador de asesores:
Y si, como lo dice el título de la nota, ¿se hunde un presidente de una nación emergente?, la respuesta es un “NO”….si aunque no lo crean, lo que se hunde es el prestigio de una nación, el valor de una nación, la esperanza de una nación, por culpa no solo del presidente sino por un asesor que no sabe o no quiere hacer su trabajo.
