El termino de “hackear” se relaciona con muchos temas ilegales, sin embargo su definición se refiere a la acción de explorar y buscar limitantes de un código o de una máquina. Otra definición consta de la acción de irrumpir o entrar de forma forzada en un sistema de computo o de una red.
Hacker en pocas palabras consta de:
Este artículo lo escribo pensando que “la máquina” es nuestro cerebro y que así como existen sistemas operativos para computadoras y dispositivos móviles, también existe un sistema operativo que cada uno de nosotros que podemos configurar para liberar nuestro máximo potencial, a continuación algunas recomendaciones:
Nuevos circuitos vía el hábito del cambio
Según la neurociencia, es posible cambiar nuestro cerebro físicamente vía lo que se le denomina “neuroplasticidad”. Es una realidad que no somos capaces de borrar nada de nuestra mente, ninguna asociación o lo que llamo “circuito” pero si podemos trazar nuevos, podemos vivir como si el pasado no existiera pero no se puede borrar. Lo que si puedes hacer con el pasado es cambiar su significado y configurar un presente y un futuro más relevante. Cuando queremos cambiar nuestro cerebro debemos de estar muy concientes que no le gusta cambiar porque tiende a optimizar recursos y buscar atajos todo el tiempo. Cambiar nuestra mentalidad es un replanteamiento que de entrada rechazamos pero mientras mas nos expongamos al cambio el cerebro se va acostumbrando.
Incomódate con el hecho de estar cómodo con lo que puedes cambiar y mejorar en tu forma de pensar. Si te casas con tu propia mentalidad no solo dejas de aprender, buscar construir relaciones humanas, un mundo que solo te confirme que tienes la razón.
El virus reactivo
Todos tenemos virus en la mente al igual que una computadora. El problema es que en muchas ocasiones no lo reconocemos. Particularmente en nuestra forma de pensar es fácil opta por “ser definido” a “definir tu entorno”. Cuando somos reactivos nos convertimos en la consecuencia de nuestro pasado y víctima de nuestro presente y al final somos definidos. Cuando somos proactivos, nosotros definimos nuestra configuración y logramos influir en la configuración de los demás.
¿Tú eres configurado o configuras?
Considera a tu competencia mejor que tú
Pero no se lo digas a tus clientes. Las personas que dicen “yo no tengo competencia” son simplemente estáticas y se duermen en sus laureles. Idealiza a tu competencia, solo con esto podrás llevar tu capacidad a otro nivel. La competencia es necesaria y lo he comentado en artículos como “gracias a la competencia puedes ser mejor” .
Candados mentales
Somos el promedio de las 5 personas con las que más convivimos. Un buena estrategia es rodearte de gente que te desafíe, no por su actitud sino por sus hechos. Hay gente que nos desafía y logra inspirarnos a ser mejores personas por su sencillez que corona su éxito. Rodéate de gente que te incomode, y de esas 5 personas tu serás el promedio.
Ten maestros más jóvenes que tú
Esto es incomodo pero es algo que personalmente siempre busco. Aprender de gente más joven que tu es una excelente garantía de que estarás vigente.
Un publicista también hackea a otros
No me refiero a manipular sino como acción detonador de cambio, lo cual creo estará condicionado en potencial hasta que tu mismo logres fomentar un cambio constante y sostenido en tu mentalidad para estar vigente.
¡Hackea tu mente!